Al respecto, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de la Republica Popular Democratica de Corea hizo publica el dia 18 la siguiente declaracion:

EE.UU. y los titeres surcoreanos tratan de cometer otra vez el canonazo en la isla Yonphyong, zona litigiosa mas delicada, con la malsana intencion de mantener a toda costa la "linea de limite al Norte" y desatar la guerra.

Desde el principio, esta "linea" ha sido una invencion ilegal que contraviene al Acuerdo de Armisticio de Corea. Por lo tanto, todas las acciones de los titeres surcoreanos para mantenerla resultaron tambien flagrante violacion del citado acuerdo.

Segun el articulo 13 del capitulo 2 del Acuerdo de Armisticio, nuestra parte tiene la jurisdiccion sobre todas las islas y aguas maritimas al norte y al oeste de la linea limitrofe entre las provincias de Hwanghae y Kyonggi, excepto a 5 islas incluso Paekryong y Yonphyong ocupadas entonces por las tropas norteamericanas.

Ademas, el articulo 15 del capitulo 2 estipula que la contraparte no puede cometer ninguna accion militar en el mar litoral administrado por nuestra parte y esta tiene el derecho a tomar cualquier accion necesaria cuando ocurra tal caso.

Despues de firmado el Acuerdo de Armisticio, el entonces comandante de las "Fuerzas de la ONU", Clark, establecio unilateralmente esa polemica "linea".

Este mismo hecho fue una violacion flagrante del articulo 61 del capitulo 5, segun el cual la modificacion del acuerdo se hace solo mediante el consenso entre ambas partes.

Ya en la decada de 1970, el secretario de Estado, el embajador en el Sur de Corea y otras autoridades de EE.UU. habian reconocido que la "linea de limite al Norte" es la ilegal que contraviene al derecho internacional.

Aunque ultimamente, EE.UU. y los titeres surcoreanos desarrollan sucesivamente los ejercicios militares provocativos, nos controlamos al maximo mientras los obuses no caen directamente en nuestras aguas jurisdiccionales, partiendo del deseo de frenar el empeoramiento de la situacion de la Peninsula Coreana y preservar la paz y la estabilidad.

Sin embargo, ellos intentan disparar otra vez hacia las aguas jurisdiccionales de nuestra parte en la isla Yonphyong, donde reina el clima de combate debido al choque armado de noviembre pasado.

Esto es la burla nunca tolerable a nuestra paciencia y la provocacion belicosa nunca justificable.

Si el fuego artillero de los titeres surcoreanos pasa el limite de prohibicion, seran inevitables la explosion de la situacion de la Peninsula Coreana y sus consecuencias.

Nuestras fuerzas armadas revolucionarias ya han declarado solemnemente que castigarian implacable y tajantemente a los provocadores que atenten la soberania y la integridad territorial de la RPDC.

Nuestro ejercito no dice palabras hueras.

Ya que las fuerzas hostiles pretendieron tergiversar el primer choque armado en la isla Yonphyong como "provocacion" de la RPDC, tenemos la necesidad de aclarar previamente la responsabilidad del eventual segundo incidente de la misma isla.

La mayor parte de la responsabilidad recae sobre EE.UU. que instigo a los titeres surcoreanos a la provocacion.

Ahora los paises vecinos y toda la sociedad internacional urgen el cese incondicional del peligrosisimo fuego artillero en la isla Yonphyong.

Solo EE.UU. lo azuza abiertamente amenazando y chantajeando a la RPDC para que esta no tome la medida de autodefensa.

El presidente de la Junta de Jefes de Estado Mayor de EE.UU., que viajo al Sur de Corea en la primera quincena del mes en curso, trazo minuciosamente con los belicistas militares surcoreanos el plan de fuego artillero en la isla Yonphyong en el principio de "bajo el protagonismo del ejercito surcoreano y con el apoyo de tropas norteamericanas".

Segun ello, los uniformados norteamericanos participaran directamente en el tiro bajo el rotulo de control de mando, garantia de comunicaciones y asistencia medica. Y todas las tropas norteamericanas estacionadas en el Sur de Corea y todo el ejercito titere surcoreano lo respaldaran entrando en la disposicion de combate.

Por otra parte, el Departamento de Estado de EE.UU. chantajeo a la RPDC diciendo que no olvidara la presencia de estadounidenses y reporteros extranjeros en la isla Yonphyong. Es decir, EE.UU. esta preparando directamente hasta el "escudo humano".

Todos los hechos muestran claramente que para sus intereses estrategicos, no le importan ni un comino a EE.UU. la paz y la estabilidad de un pais.

Ajustaremos la cuenta con EE.UU. de todas las circunstancias extremadas que se daran en la Peninsula Coreana y de sus consecuencias.