La victoria es siempre nuestra porque al frente del Partido del Trabajo de Corea y la revolucion esta el Dirigente y tenemos la invencible unidad monolitica de todos los militares y civiles en torno a el, el poderoso ejercito revolucionario del monte Paektu y el regimen socialista del Juche, comienza el editorial y prosigue:

El Dirigente es patriota sin igual, creador de felicidad y padre generoso y maestro del pueblo quien glorifica a Corea como inexpugnable potencia socialista, realiza con su incansable y abnegada direccion todos los ideales del pueblo coreano y conduce a todos los militares y civiles con el amor y confianza en los camaradas.

Gracias a las imborrables proezas revolucionarias del Songun del Dirigente, nuestro pais es dignificado como potencia ideo-politica e independiente que tiene invencibles fuerzas armadas e inquebrantable unidad monolitica.

El PTC considera la voz del pueblo como fundamento de la unidad monolitica y se ha fortalecido como partido madre que se responsabiliza totalmente del destino del pueblo. Esto es el brillante fruto de la politica del Dirigente de dar importancia al pueblo.

En el trayecto de marcha forzada que emprende de dia a noche el Dirigente para realizar la direccion en el terreno, acontecen sucesivamente los eventos relevantes nunca vistos en la historia nacional y se realizan uno por uno los ideales seculares de nuestro pueblo.

El gran auge revolucionario que se da en todo el pais es producto de amor y confianza del Dirigente en el ejercito y el pueblo y la explosion de la inagotable fuerza espiritual de estos para recompensarlos.

Es definitiva la victoria de la causa de construccion de la gran potencia prospera del PTC porque son grandiosas la idea y la direccion del Dirigente y es solida la unidad monolitica de las filas revolucionarias del Songun que confian y siguen con fidelidad a el.