Segun el resultado de investigacion, ha sido confirmado su grave acto criminal contra la RPDC y el reconocio francamente su culpabilidad.

Robert King, enviado especial encargado de los derechos humanos y asuntos humanitarios del Departamento de Estado de EE.UU., que se encuentra de visita en Corea, expreso lastima por lo ocurrido en representacion del gobierno norteamericano y prometio hacer todo lo posible por prevenir la repeticion de casos semejantes.

Anteriormente, el ex presidente Jimmy Carter y el pastor Franklin Graham de EE.UU. pidieron repetidamente que perdonaran al culpable con magnanimidad.

Tomando en consideracion tal solicitud, el gobierno de la RPDC decidio liberar y devolver a Young-su Jun desde el punto de vista humanitario.

Durante la retencion de Young-su Jun, se le facilitaron el contacto consular normal de la embajada de Suecia en Corea, que representa los intereses de EE.UU. en Corea, el intercambio de cartas y llamadas telefonicas con sus familiares y la asistencia medica en un hospital.