Ultimamente, Japon desestabiliza a Asia oriental y agrava la tension en esta region exponiendo en todas partes su absurda, cinica y obstinada ambicion de expandir el territorio.

Por ejemplo, al tergiversar a su conveniencia la nota de recomienda publicada por el Comite de Demarcacion de Plataformas Continentales de la ONU desaprobando la propuesta de Japon de expandir su plataforma continental, ese pais isleno insistio en que Okinodori fue reconocido como su islote.

Okinodori no pasa de ser una roca del Mar Pacifico situada a centenares de kilometros del territorio japones, por lo tanto, no pertenece a la categoria de islas establecida por la convencion de ley maritima de la ONU ni puede tener su propia zona maritima economica ni ser fundamento de la extension de plataforma continental.

Sin embargo, Japon se obstina en su descarada ambicion de convertirlo en un islote y apoderarse de las zonas submarinas perifericas.

Es decir, el expansionismo territorial de Japon, que insiste en su soberania sobre el islote Tok, sagrado territorio de la nacion coreana, y esta antojado de las tierras legitimas de otros paises vecinos, llego a tal grado que trata ahora de despojar hasta el fondo del mar internacional, patrimonio comun de la humanidad.

El hecho de que Japon amplia de manera escalonada sus acciones expansionistas dando acicates a su militarizacion bajo el abrigo de las fuerzas foraneas, prenuncia el renacimiento del militarismo japones que impuso a la humanidad indecibles sufrimientos y desastres para realizar su ilusion agresiva de la "esfera de coprosperidad de la gran Asia Oriental".

Por la paz mundial y el bienestar de la humanidad, la sociedad internacional tendra que prestar debida atencion y rechazar categoricamente la ambicion expansionista de Japon.