Aunque pase mucho tiempo y cambien las generaciones, no seran encubiertos nunca los crimenes de los imperialistas japoneses cometidos contra el pueblo coreano, destaca el diario y continua:

En 1905 y en 1907, Japon fabrico el "Tratado de 5 Puntos de Ulsa" y el "Tratado de 7 Puntos de Jongmi", en virtud de los cuales privo al gobierno feudal de la dinastia de los Ri los derechos a la diplomacia y a la politica interior.

Para poner punto final hasta a la existencia superficial del Estado coreano, los imperialistas japoneses fabricaron el 22 de agosto de 1910 el "Tratado de anexion de Corea a Japon" violando flagrantemente el principio y los reglamentos elementales que rigen la firma de tratados internacionales, y el 29 de agosto, lo promulgaron oficialmente.

De esta manera, Corea con larga historia de cinco milenios se convirtio en colonia total de Japon.

Despues, Japon practico en Corea el dominio ilegal mediante el gobernador general causando indecibles sufrimientos y desgracias al pueblo coreano.

Sin embargo, los reaccionarios japoneses tergiversan y niegan obstinadamente sus crimenes del pasado, lejos de pedir disculpas e indemnizar por esos tremendos danos.

Hay que saldar la cuenta final de los crimenes del pasado de Japon y exterminar a las fuerzas vendepatrias projaponesas.

La banda del traidor surcoreano Lee Myung Bak practica desde el principio de su mandato la politica de sumision a Japon y tolera la tergiversacion de la historia, la ambicion de usurpar el islote Tok y otras maniobras de nueva agresion del pais isleno.

La actitud asquerosa de la banda de Lee alienta la ambicion de nueva agresion de los reaccionarios japoneses.

Todos los integrantes de la nacion coreana deben levantarse en la lucha pannacional contra Japon, que acecha la oportunidad de nueva agresion rehusando a pedir perdon e indemnizar sus crimenes del pasado, y contra la banda del traidor Lee Myung Bak que estrecha la mano hasta con ese enemigo jurado de la nacion para mantener su precaria y sucia vida politica.