Recientemente, en su reporte presentado a la reunion de la junta de administradores de la AIEA, el director general de este organismo dijo que causan seria preocupacion la construccion de reactor de agua ligera y el enriquecimiento de uranio de la RPDC.

En sintonia con tal criterio, un portavoz del Departamento de Estado de EE.UU. insistio en que la RPDC suspenda las actividades nucleares incluyendo la construccion de reactor de agua ligera y acepte la inspeccion de la AIEA.

Anda perdida todavia la AIEA que agravo el problema nuclear de la Peninsula Coreana sumandose a la politica hostil a la RPDC de EE.UU. y perdio por eso el derecho a intervenir en las actividades nucleares de la RPDC.

La AIEA, que hasta ahora no expreso nunca la preocupacion sobre el programa nuclear de otros paises poseedores de armas nucleares, lo hizo de manera discriminada solo en el caso de la RPDC.

Esto es un acto injusto que carece de imparcialidad.

La AIEA y EE.UU. no deberan tratar de ver la realidad de hoy con la vieja pauta que valia cuando las actividades nucleares de la RPDC se limitaban a los fines pacificos.

La RPDC, que se convirtio en el digno portador de arma nuclear frente a la continua politica hostil de EE.UU., tiene la norma al estilo coreano, con la que no puede hacer nada la AIEA con su facultad de tratar los asuntos principalmente de los Estados desnuclearizados.

La AIEA y EE.UU. deben actuar con prudencia justipreciando la realidad.