En la ocasion participaron los clerigos del Comite Central de la Federacion de Budistas de Corea, los monjes y los creyentes del citado templo, por la parte norcoreana y por la surcoreana, los monjes y creyentes de la Orden Budista Jogye.

Hubo ceremonia budista e intervenciones y se dio lectura a la oracion conjunta de budistas intercoreanos para rezar la reunificacion de Corea.

Los oradores subrayaron que el templo Singye, reconstruido magnificamente con la fuerza unida de los budistas del Norte y el Sur, no cumple su papel merecido debido a las maniobras obstructoras de las fuerzas conservadoras anti-reunificacion que no agradan el deseo de los connacionales dirigido a la unidad nacional, la reunificacion y al monte Kumgang.

Llamaron a todos los budistas de ambas partes a unirse con el alma Dharma para mejorar las relaciones intercoreanas e implementar las declaraciones N-S y a convertir el templo Singye en el centro de la reconciliacion nacional donde se llena la doctrina budista.

La oracion conjunta manifiesta la determinacion de los budistas de eliminar la desconfianza, la confrontacion entre el Norte y el Sur de Corea y el peligro de guerra en acato a la Declaracion Conjunta Norte-Sur del 15 de junio y la declaracion del 4 de octubre y de movilizarse en la accion practica para asegurar la paz duradera.