Obama y otros gobernantes norteamericanos practicaron la politica hostil anti-RPDC con la ambicion de derrumbar a esta potencia invencible y dignificada.

El ejercito y el pueblo de Corea, que han enaltecido al Mariscal Kim Jong Un a la cabeza de la revolucion, avanzan por el camino del socialismo del Juche indicado por los Generalisimos Kim Il Sung y Kim Jong Il y lo haran tambien en el futuro.

EE.UU. debe sacar la leccion de su politica anti-RPDC viendo bien la invariable voluntad del ejercito y el pueblo de Corea.

El cambio de esa politica es la unanime demanda de toda la nacion coreana y la sociedad internacional.

Si EE.UU. asume la voluntad de cancelar su politica hostil anti-RPDC conforme a los intereses propios y a la aspiracion de los pueblos pacifistas del mundo justipreciando la situacion cambiada y la corriente de desarrollo de la historia, sera resuelto sin complicaciones el problema nuclear de la Peninsula Coreana.

Ademas, se abrira indudablemente una fase trascendental en la situacion de la Peninsula Coreana y las relaciones bilaterales, lo cual convendria a la evolucion de la situacion de Asia y el resto del mundo y al mismo EE.UU.

EE.UU. debe cambiar de inmediato su anacronica politica sobre la RPDC.