Con motivo del levantamiento del primero de marzo de 1919, los imperialistas japoneses asesinaron barbaramente a mas de 100 mil coreanos levantados en la manifestacion pacifica contra la dominacion colonial de Japon y en demanda a la independencia del pais, senala la nota y prosigue:

Hasta la fecha, Japon nunca pidio la sincera disculpa ni aclaro el verdadero aspecto de la represion del dicho levantamiento, la masacre de los coreanos en el gran terremoto de Kanto, el hundimiento del barco "Ukishima-maru" por explosion y otros casos de asesinatos y los crimenes antieticos cometidos en el pasado contra el pueblo coreano, entre otros, el reclutamiento forzoso, el trabajo forzoso, el caso de esclavitud sexual para el ejercito japones.

En los ultimos anos, el mandatario japones dijo abiertamente que "no existe el testigo de que el viejo ejercito japones secuestro a las mujeres para obligarles una vida consoladora". En tanto, en enero del presente ano, el presidente recien nombrado de NHK justifico el crimen de esclavitud sexual diciendo que "habia esclavas sexuales en cualesquier paises beligerantes".

Mas de cien politiqueros visitaron colectivamente el santuario Yasukuni para consolar a los criminales de guerra quienes acarrearon al pueblo coreano y otros asiaticos las calamidades indelebles y soltaron las sofisterias de que en el mundo todavia no esta establecida la definicion sobre la agresion, lo que consterna la sociedad internacional.

La realidad de Japon hace imaginar la figura de este pais en vispera de su derrota, en que enloquecido por la ambicion de realizar la "esfera de coprosperidad de la gran Asia Oriental", conducia el coche imperialista propagando la guerra de agresion como la "guerra justa".

Japon debe conocer que si no presta oidos a las voces justas recurriendo al anacronico proceder para evadir la liquidacion del pasado y tergiversar la historia, llevara su pais y nacion al abismo de la destruccion.

El pais isla debe corregir la erronea concepcion de historia y pensamiento y tomar la actitud sincera de liquidar merecidamente todas las calamidades y dolores del pueblo coreanos y los demas asiaticos sufridos en el tiempo pasado por el imperialismo japones.