La banda de Park Geun-hye movilizo a muchos policias para que impidieran el acto de recordacion, el mitin con velas encendidas y la manifestacion, que se realizan por doquier del Sur de Corea, comienza la nota y prosigue:

Esas fuerzas policiales asaltaron las sedes de mitin y arrestaron solo en Seul a cientos de manifestantes.

Por otra parte, arrestaron en masas a los universitarios que intentaban entrar en Chongwadae exigiendo la retirada de Park Geun-hye y la destitucion de Kim Ki Chun, jefe de gabinete de los secretarios de Chongwadae.

Ahora, los policias gangsteres cometen atrocidades para disolver el mitin y la manifestacion y detienen a los hombres y mujeres de todas las edades, incluso los alumnos de la secundaria.

Tras colocar por doquier los policias vestidos de civil, les hacen identificar y registrar a los peatones con la cinta amarilla y perseguir a los familiares de victimas para que ellos no se incorporen a las manifestaciones.

Ademas, toman medida de castigo duro contra los profesores que publicaron la declaracion de la situacion en demanda de la retirada de Park y hostigan tambien a los periodistas que difundieron articulos condenatorios a la mandataria.

Tambien, irrumpieron en la sede de ceremonia funeral de un difunto, que se suicido protestando la represion de las autoridades al sindicato y la explotacion brutal de monopolistas, arrebataron su cadaver y la urna cineraria y capturaron a decenas de obreros protestantes tirandoles lacrimogenos.

La ola de represion de la banda titere surcoreana es el crimen antietico y anti-DDHH que pueden cometer solo los bestias disfrazados del hombre y los gangsteres herederos de la naturaleza fascista de la dictadura de "Yusin".

La locura fascista es una revelacion de extrema inquietud y pavor y el ultimo esfuerzo para cambiar la desfavorable situacion electoral.

La banda de Park debe responsabilizarse totalmente de la tragedia del barco "Sewol".

Debe pedir disculpas por esa escalofriante masacre y ser sentenciada severamente por la opinion publica.

Pero, al dar espaldas a la justa demanda de los familiares de victimas y los habitantes de diferentes sectores que demandan la averiguacion consecuente del verdadero aspecto y el castigo a los involucrados, Park Geun-hye trata de calmar la opinion publica con unas palabras bien hilvanadas y la destitucion de algunos inferiores.

Por otra parte, usa la violencia contra los inocentes levantados en la lucha contra las autoridades, acusandolos de "ilegalidad" y "violacion de ley".

La brutal represion demuestra claramente que la "declaracion al pueblo" de Park Geun-hye no pasa de ser una farsa para apaciguar la opinion publica enfadada.

Toda la poblacion surcoreana debe castigar severamente a la banda de Park Geun-hye, causa de todas las calamidades y librarse a toda costa del rencor acumulado.