Llego al climax en el ano pasado la campana norteamericana tendente a aislar y aplastar a la RPDC, baluarte del socialismo, la independencia y la justicia.

El imperio yanqui recurrio persistentemente a la presion militar y el bloqueo economico para derrocar a fuerza la RPDC.

Cuestiono el disuasivo nuclear de autodefensa de la RPDC como "amenaza" y "provocacion", introdujo en el suelo surcoreano y su contorno enormes fuerzas armadas y desarrollo incesantemente los ejercicios de guerra anti-RPDC de toda indole.

Una vez fracasado su intento de eliminar el disuasivo nuclear de la RPDC y aplastarla, armo villano alboroto de "DDHH" y politizando e internacionalizando este tema fabrico hasta la "resolucion de DDHH" anti-RPDC instigando a sus fuerzas satelites.

Debido a tales maniobras hostiles de EE.UU., en la Peninsula Coreana no desaparece el circulo vicioso de agravacion de la tension y se aumenta cada dia mas la peligrosidad de guerra nuclear.

Frente a la realidad de hoy en que se ven pisoteadas la justicia y la veracidad y se toleran las arbitrariedades de EE.UU., hemos consolidado por todos los medios la capacidad de autodefensa nacional basada en el disuasivo nuclear sosteniendo en alto la bandera del Songun.

Todo esto es el resultado de la politica erronea de EE.UU. sobre la RPDC.

Lo comprueba la historia de confrontacion RPDC-EE.UU.

Los elaboradores de la politica de EE.UU. vinieron recurriendo a la presion militar, la sancion, el bloqueo economico, etc. practicando la politica hostil a la RPDC, pero no obtuvieron nada.

El cambio de la politica hostil norteamericana sobre la RPDC se presenta como una demanda apremiante en vista de la situacion y la tendencia de la epoca actual.

En el caso de que el imperio no tome una opcion correcta en este tema, se prolongara y se fortalecera la posesion del disuasivo de guerra de la RPDC y se aumentaran tanto mas los desastres de EE.UU.

Si EE.UU. respeta, aunque sea ahora, nuestra soberania y nos trata con buena fe sin intervenir en nuestros asuntos internos, tambien actuaremos segun ello, lo que es la invariable posicion de la RPDC.

Debe tomar la decision politica de abandonar su politica hostil a la RPDC tomando en consideracion la situacion cambiada y la corriente de la evolucion de la historia y conforme a los intereses de su propio pais y la aspiracion de los pueblos amantes de la paz mundial.