El acta senala que las leyes internacionales y las normas de guerra, inclusive la declaracion de la Haya sobre la prohibicion de uso de gases toxicos, estipulan prohibir el empleo de armas de extermino masivo tales como armas biologicas y otros quimicos venenosos, determinar a sus usuarios como graves criminales y sentenciarles la responsabilidad penal, y prosigue:

Sin embargo, el pais norteamericano echo una vista gorda a todas leyes y normas internacionales durante la pasada guerra coreana y asesino masivamente a las personas lanzando hasta las armas bacteriologicas y otras quimicas venenosas.

Al trazar el plano de provocacion de guerra contra la RPDC, el imperio promovio en secreto los preparativos para la guerra bacteriologica.

Cuando el imperialismo japones fue derrotado en la Segunda Guerra Mundial, el imperio yanqui se entrego a recoger los datos de investigacion de la unidad 731 del infame ejercito japones y concerto en 1947 un acuerdo extraoficial de no entregar al jefe de esa unidad Shiro Ishii y otros verdugos al tribunal de criminales de guerra en Tokio a precio de recibir a los especialistas y los datos de ensayo hecho con el cuerpo humano vivo de esa unidad japonesa.

Asi, EE.UU. recibio de la parte japonesa mas de 8 mil datos de ensayo de bacteria y gas toxico cometido contra mas de 3 millones 600 mil personas y otros de referencia, las fotos, el diseno de bombas bacteriologicas, los institutos e instalaciones de investigacion de bacterias en Japon, etc.

Segun la orden de MacArthur, comandante de tropas yanquis en el Extremo Oriente, Shiro Ishii y otros criminales de la unidad 731 se sumaron a la investigacion de armas biologicas de tropas norteamericanas.

Los datos de la unidad 731 del ejercito japones se trasladaron a una unidad norteamericana reconocida como centro de investigacion de armas biologicas de Estados Unidos de aquel entonces, y los cientificos norteamericanos elaboraron mas de 20 informes de estudio a base de ellos.

A base de los datos de especialistas japoneses y el estudio propio, EE.UU. perpetro en varias ocasiones en los anos 1946 y 1949 el experimento de armas biologicas que propagan la colera y encefalitis japones contra la poblacion surcoreana.

A base de ello, la Junta de Jefes de Estado Mayor de EE.UU. elaboro el plan de operacion emergente para la guerra bacteriologica y lo llevo a la practica durante la pasada guerra coreana contra los habitantes coreanos.

Retirandose por la ofensiva del Ejercito Popular de Corea, las tropas agresoras yanquis que habian ocupado temporalmente la parte norte de la RPDC propagaron del 29 de noviembre al 8 de diciembre del 1950 con las maneras astutas muchos germenes patogenos como la viruela en Pyongyang, el distrito de Yangdok de la provincia de Phyong-an del Sur, los distritos de Kowon y Jangjin de la provincia de Hamgyong del Sur y otras regiones.

Quedo descubierto en 2010 en el archivo nacional de EE.UU. un documento secreto de categoria A, segun lo cual la Junta de Jefes de Estado Mayor de EE.UU. ordeno el 21 de septiembre de 1951 "realizar en gran envergadura el experimento real para conocer el efecto de los germenes patogenos especificos para la guerra biologica en la situacion operacional".

El imperio yanqui lanzo primeras bombas biologicas en la zona norte del rio Chongchon y la zona sur del rio Amnok, asi como en Yangdok, Hamhung y Wonsan movilizando sus fuerzas aereas estacionadas en los suelos surcoreano y japones.

En 1952, los agresores yanquis lanzaron en gran escala las bombas bacteriologicas en todas las regiones de la parte norte de la RPDC.

Los yanquis utilizaron no solo las armas biologicas sino las quimicas prohibidas por la ley internacional.

Al salpicar en gran escala el 6 de mayo de 1951 los gases toxicos sobre la ciudad de Nampho asesinaron a 1 379 personas inocentes. Lanzaron el 6 de julio y el dia primero de septiembre las bombas lacrimogenas y las de gases asfixiantes en la zona de Wonsan y otras regiones de las provincias de Hwanghae del Sur y del Norte causando asi muchos toxicomanos y muertos.

No vacilaron en mezclar las sustancias venenosas en los caramelos, galletas y otros alimentos y el dinero.

Violando abiertamente el tratado internacional sobre el trato de prisioneros de guerra, asesinaron bestialmente a los prisioneros coreanos tomandolos como objeto de experimento de las guerras biologicas y quimicas.

Despues de firmado el Acuerdo de Armisticio, EE.UU. recurrio sin parar a las maniobras de guerra bioquimica.

En 1976, EE.UU. envio al suelo surcoreano un destacamento de avanzada adscrito a la unidad 406 del Instituto de Armas Biologicas de las fuerzas terrestres norteamericanas, enclavada en el departamento de Kanagawa de Japon.

El destacamento instalo los institutos de bacterias en la Universidad Koryo y la Kyunghee donde se llevaron a cabo las pruebas de armas bacteriologicas hemorragicas con los habitantes y estudiantes surcoreanos.

Los yanquis utilizaron hasta las visceras y fetos en las pruebas de armas biologicas.

Ademas, prepararon la guerra quimica contra la RPDC.

Ya desde hace mucho tiempo, expusieron abiertamente la decision de "modernizar de continuo las armas de sustancias nocivas para el combate" considerandolas como uno de los elementos principales de las potencialidades militares norteamericanas". Para ese fin, emplazaron en el Sur de Corea enorme cantidad de armas y sustancias quimicas cuyo uso esta prohibido en virtud de la ley internacional.

Al mismo tiempo, realizaron las pruebas de estas armas mortiferas con los habitantes de ambas partes de Corea.

Los titeres surcoreanos fueron complices de la guerra bioquimica de EE.UU.

Desde que vieron la eficiencia de armas bioquimicas usadas por EE.UU. en la guerra vietnamita, los titeres surcoreanos se enfrascaron en junio de 1981 en el desarrollo de las mismas.

Reforzaron los cerebros del instituto de armas bacteriologicas y al mismo tiempo, impulsaron el desarrollo conjunto de armas bacteriologicas y quimicas con los institutos del Departamento de Defensa norteamericano.

Con el permiso del amo norteamericano sobre la posesion de la capacidad independiente de guerra bioquimica, instigaron a los consorcios militares y civiles al desarrollo y produccion de armas bioquimicas.

Hicieron criar en el instituto de armas bacteriologicas los insectos, garrapatas y roedores e instalar en la Universidad Koryo, la Kyunghee y otras los organos de investigacion bacteriologica en colaboracion con EE.UU. para estudiar y desarrollar nuevos agentes patogenos.

Tales datos no pasan de ser una parte de las atrocidades bioquimicas cometidas por EE.UU. y los titeres surcoreanos en el periodo de la pasada guerra coreana y en el tiempo posbelico en la Peninsula Coreana.

La ONU y otras organizaciones internacionales y toda la humanidad deben sentenciar en virtud de la ley internacional a EE.UU. y otros criminales de guerra que mataron a incontables coreanos y contagiaron el territorio coreano y cobrar el precio de enormes perdidas causadas al pueblo coreano.

Los titeres surcoreanos tampoco pueden eludir el castigo.

Ellos deben pedir disculpas y ser condenados por haber amparado las atrocidades bacteriologicas de EE.UU. y ofendido a las victimas y sus familiares.