Al respecto, el portavoz del Comite Coreano por Medidas sobre el Problema de ex Esclavas Sexuales para el Ejercito Japones y Victimas de Reclutamiento Forzoso publico el dia 2 una declaracion que continua:

Como ya trascendidos, desde el principio del ano nuevo, los reaccionarios japoneses demandan a los titeres surcoreanos el desalojo de las estatuas de nina esclava sexual para el viejo ejercito japones, instaladas ante la embajada japonesa en Seul y el consulado general del mismo pais en Pusan.

Ademas, retiraron del Sur de Corea al embajador y al consul general e imponen la cancelacion del plan de levantamiento de la estatua de nina en el islote Tok, que impulsa la provincia de Kyonggi, urgiendo a los titeres surcoreanos que cambien el nombre de ella como "estatua de consoladora".

Insistiendo absurdamente en que si no remueven las estatuas, no retornaran su embajador y consul general, obligan casi todos los dias a la parte surcoreana a implementar el "acuerdo de consoladoras" con los chismes como que "no hay datos que comprueban el arresto forzado del ejercito japones" y "no esperen la normalizacion de las relaciones Japon-Sur de Corea sin que haya los movimientos para desalojar las estatuas de nina".

En lugar de pedir disculpas a la nacion coreana, los reaccionarios japoneses se portan asi partiendo de su logica de bandido y gran cinismo.

Lo mas problematico es la conducta abominable de la banda titere surcoreana que se muestra mas vil sin refutar la descarada demanda de los reaccionarios japoneses.

El canciller Yun Pyong Se y otros vendepatrias del Sur de Corea adulan a los reaccionarios japoneses diciendo que "respetaran y ejecutaran sinceramente el acuerdo de consoladoras" y "consultaran activamente con Japon por varios canales diplomaticos".

Para colmo, despacharon a las entidades autonomas locales hasta la nota oficial secreta que contiene este parrafo: "es necesario recoger los criterios inteligentes para discutir el proyecto de trasladar la estatua de nina al lugar adecuado".

A pesar de la fuerte protesta y censura de distintos estratos del Sur de Corea, disparatean que las autoridades tienen la posicion de que "instalar alguna estatua ante la legacion diplomatica no conviene a las costumbres internacionales alusivas a la proteccion de ella".

Insatisfechas de haber tolerado los crimenes del pasado cometidos por los imperialistas nipones al firmar el humillante "acuerdo" sobre el problema de esclavitud sexual, las autoridades titeres surcoreanas obedecen ahora a las demandas descaradas del pais isla. Este hecho deja conocer que ellas son "5 Traidores de Ulsa" de version moderna y elementos vendepatrias colmados del servilismo a grandes potencias.

En nombre de la nacion, hay que enterrar en la tumba de la historia a esos traidores que hasta en los ultimos momentos de su vida politica, no dejan de vender la dignidad e intereses nacionales a los reaccionarios japoneses.

Toda la nacion coreana cobrara a toda costa las disculpas e indemnizacion por todas las barbaridades anti-eticas, cometidas por Japon en el siglo pasado contra el pueblo coreano, luchando con el espiritu e impetu manifestados durante el Levantamiento Popular del Primero de Marzo.