Cuando Kang fue designada como candidata a la cancillera surcoreana, los partidos opositores conservadores le impusieron la retirada voluntaria bajo la sospecha de corrupcion. Entonces, para liberarse de esa situacion desfavorable, ella acuso a la RPDC diciendo que hay que "tratar el problema nuclear del Norte (de Corea) como una tarea mas inminente", es necesaria la "sancion mas dura frente a la provocacion adicional" y el paro del turismo al monte Kumgang y la cerrada de la Zona Industrial de Kaesong "se deben enteramente a los actos provocativos sin precedentes del Norte de Corea", revela asi el periodico y continua:

Tan pronto como asumiera el cargo estatal, ella se reunio con el comandante de las tropas norteamericanas ocupantes del Sur de Corea, el embajador interino norteamericano en Seul, el presidente de la Asociacion Diplomatica de EE.UU. y otros, ocasiones en las cuales adulo a sus amos yanquis prometiendoles la "primordial cooperacion" con EE.UU. y diciendo la "amenaza de las armas nucleares y misiles del Norte de Corea" y expreso la posicion a favor de la aprobacion de la "resolucion de DDHH del Norte" en la ONU.

Las tonterias de Kang desafian a la opinion publica surcoreana levantada en la lucha con velas encendidas.

Los habitantes surcoreanos desean con ansiedad la mejora pronta de la relaciones intercoreanas para lograr la paz y la estabilidad en la Peninsula Coreana.

Sin hacer caso del deseo angustioso de los surcoreanos, la arribista Kang se apresura por adular al amo gringo para satisfacer su ambicion, exponiendo su fachada de elemento proyanqui.

Seria mejor que Kang mantenga callada meditando bien las consecuencias de sus actos verbales.