Asi adelanta el diario Rodong Sinmun en un articulo individual divulgado el dia 7 y continua:

La ambicion de los militaristas del siglo pasado se hace realidad por sus sucesores de cuno moderno.

En Japon, el militarismo no es un fantasma, sino un ente real. Esta doctrina se hace institucional en todos los sectores de la vida social como la politica, la economia, los asuntos militares y la cultura envenenando a numerosos japoneses. Se puede decir que la enmienda de la Constitucion es el ultimo paso para fabricar el Estado militarista que emprenderia sin obstaculos el camino de reagresion.

Bajo la mascara de "civil", la banda de Abe y otras fuerzas reaccionarias y conservadoras de Japon desean el renacimiento del "gran imperio nipon" que ocupaba el continente asiatico jactandose de su poderio.

El militarismo japones se convirtio en la fuerza agresiva que amenaza la paz y la seguridad de la region de Asia-Pacifico.

El mundo tendra que redoblar la vigilancia sobre la peligrosidad del militarismo japones que impondra grandes calamidades a esa region.