El hecho testimonia que Japon no puede negar ni encubrir el crimen de esclavitud sexual y que la liquidacion del pasado del mismo pais es la ineludible exigencia de la sociedad internacional.

Ratifica el diario Rodong Sinmun en un comentario individual difundido hoy y prosigue:

Ese delito, cometido por el pais isleno en la primera mitad del siglo pasado, deviene un tremendo crimen de lesa humanidad que no tiene prescripcion juridica internacional.

Lo mas problematico es que fue perpetrado de manera organizada y sistematica bajo la intervencion directa del entonces gobierno japones.

Segun la ley de costumbres y el codigo internacionales sobre la prescripcion juridica, no se la aplica a los crimenes referentes a los derechos humanos fundamentales como el crimen de guerra, el de extradicion y el de esclavitud.

Japon debe disculparse sinceramente de sus fechorias del pasado e indemnizarlas incondicionalmente. He aqui la unica via para vivir con la frente alta en la sociedad internacional.