Es una sofisteria que deja consternado a todo el mundo.

Muchos medios de prensa del mundo estiman que el Izumo de las "Fuerzas Maritimas de Autodefensa" es parecido o superior a los portaaviones modernos en varios aspectos.

El buque Izumo es capaz de cargar 14 helicopteros al maximo y despegar o aterrizar a la vez 5 aeronaves y dispone de muchas cosas necesarias a los portaaviones.

Ya desde la botadura del Izumo, los especialistas militares evaluaron que no es un buque escolta para la defensa sino es un semiportaaviones que puede convertirse en cualquier momento en un portaaviones con la capacidad de ataque preventivo.

Es ilogica la insistencia de Japon en que no es un portaaviones el buque Izumo que se reestructurara como un buque capaz de cargar hasta los cazas ultramodernos como F-35B.

El proceder de los reaccionarios japoneses forma parte de su ambicion arraigada de convertir su pais en potencia militar y cometer nueva agresion.

Despues de la aparicion del poder belicoso de Abe, se hacen realidad la conversion de Japon en potencia militar y la expansion a ultramar, de las cuales se preocupaba todo el mundo.

Japon ya preparo el fundamento juridico para el avance militar a ultramar con la aprobacion de la ley del tiempo de emergencia del contorno, la ley de medidas especiales antiterroristas, etc. y se enfrasca en la enmienda de la Constitucion a fin de legalizar la existencia de las "Fuerzas de Autodefensa".

En el nuevo "programa de defensa", anoto que en el lustro proximo aumentaria los gastos para la defensa 6.4 % mas en comparacion con el mismo periodo anterior, pretextando que el ambiente de seguridad de su pais se agrava a un ritmo acelerado.

En el caso de que el pais isleno cuente con el portaaviones prohibido en virtud de la Constitucion vigente, se realizara la ambicion del poder de Abe de convertir su pais en el Estado capaz de cumplir la guerra.

La banda de Abe intenta agredir a sus caprichos a otros paises como lo hizo en el siglo pasado, pero es una ilusion vana.

La sociedad internacional observa con vigilancia las tentativas de Japon, perturbador de la paz, de convertirse en potencia militar y lograr la expansion territorial.