Es muy ridiculo el intento cinico y absurdo de los politiqueros del pais isleno de ocultar sus crimenes sangrientos del pasado.

Como es conocido por todo el mundo, fue resuelto ya hace mucho tiempo el problema de secuestro de que habla Japon.

Sin embargo, la banda de Abe malemplea este tema para realizar sus designios malintencionados como el mantenimiento del poder y las elecciones disparateando que "no debemos dar el toque final al problema de secuestro".

Como se ve, el alboroto de secuestro de los reaccionarios japoneses no pasa de ser una farsa para salir de la crisis politica.

Ahora la banda de Abe se enfrenta con la fuerte demanda de la sociedad internacional de liquidar lo mas pronto posible los crimenes cometidos en el siglo pasado por los imperialistas japoneses.

Esta presion internacional se aumenta a medida que crece el clima de paz y estabilidad de la region, creado por los esfuerzos protagonicos de la RPDC.

Este ambiente exterior se considera como un gran desafio para los politiqueros japoneses que intentan realizar su anejada ambicion de la "esfera de coprosperidad de la gran Asia Oriental" mediante la resucitacion del militarismo y la conversion de su pais en potencia militar.

En este contexto, la banda de Abe opone el problema de secuestro al de liquidacion del pasado a fin de eludir su responsabilidad y deber historicos.

Pero, es una ilusion vana.

Es muy ridiculo el intento de Japon de apaciguar con el problema de secuestro el sentimiento antijapones de la sociedad internacional y ocultar su historia de crimenes de lesa humanidad.

Las resoluciones aprobadas por las cortes militares internacionales despues del fin de la Segunda Guerra Mundial y las reglas sobre los crimenes de guerra estipuladas en el informe adoptado en agosto de 1999 en el subcomite de DDHH de la ONU muestran que los crimenes cometidos en el siglo pasado por Japon son delitos graves que no tienen prescripcion.

Japon no puede eludir de ninguna manera la responsabilidad por sus crimenes del pasado.

Ha de cumplir con sinceridad su deber legal y moral asumido ante la nacion coreana y la humanidad, en lugar de abultar su expediente criminal enganando al mundo con el problema de secuestro.

Lo que debe hacer el pais criminal de guerra es pedir perdon por sus crimenes de lesa humanidad e indemnizarlos consecuentemente.