Lo problematico es que durante 27 anos pasados, su nombre figuraba en la lista de los desaparecidos de que "no se podia descartar de la posibilidad de haber sido secuestrado por parte del Norte de Corea".

Revela asi el periodico Minju Joson en un comentario individual de este martes y continua:

Los reaccionarios japoneses suelen acusar sin escrupulos a la RPDC describiendo los casos de desaparecidos como "conducta del Norte de Corea" sin esclarecer la verdad.

El hecho muestra que ellos estan muy interesados en politizar el problema de secuestro.

Su verdadera intencion es desviar la atencion de su poblacion que esta descontenta con la politica injusta, infundir en la sociedad japonesa la hostilidad a la RPDC manchando su prestigio y preparar las condiciones favorables a su ambicion militarista y expansionista.

Ellos intentan disfrazarse de victimas de secuestro a fin de eludir la responsabilidad de la liquidacion del pasado. He aqui la esencia de su insistencia en el secuestro.

Pero, no se sale con la suya la artimana del pais enano en sentido politico.

Japon debe dejar de enganar al mundo con el rumor de secuestro.