Tan pronto como se publicara esa decision de las autoridades, el Partido de Corea Libre y otras fuerzas conservadoras la censuran como "juego de azar que pone en peligro la alianza con Japon", "acto suicida que sacude el eje de la seguridad nacional" y "reaccion frivola e impulsiva".

La cancelacion de GSOMIA es el fruto de la lucha de la poblacion surcoreana indignada por la conducta cinica de Japon que elude la indemnizacion de sus crimenes del pasado y lanza la brutal agresion economica contra el Sur de Corea.

Sin embargo, la banda conservadora se pone de parte del enemigo jurado (Japon) de la nacion coreana sin decir ni una palabra de protesta, lo cual muestra claramente su temperamento vendepatria y projapones.

Lo problematico es que el proceder de ellos no se debe solo a su conciencia avasallante sino parte del siniestro intento de justificar el crimen de la traidora Park Geun-hye, que firmo el GSOMIA con Japon, y retomar el poder adulando a las fuerzas extranjeras.

El pacto en cuestion fue discutido ya en el periodo de mandato del traidor Lee Myung Bak y firmado en el ultimo tiempo del "poder" de Park Geun-hye. Pues, es una obra colectiva del "poder" conservador y vendepatria y el vicio mas tipico de su politica diplomatica y de seguridad.

A medida que se revela la esencia reaccionaria del GSOMIA y se aumenta la demanda de la opinion publica de invalidarlo, se agrandara la antipatia de los nacionales y extranjeros contra la banda conservadora firmante del convenio y se hara dificil su retorno al poder.

Por su parte, Hwang Kyo An, que ocupaba el cargo de "primer ministro" en el mandato de Park Geun-hye, anda desesperado para apaciguar la colera de la poblacion con las sofisterias como "convenio para la politica interior" e "insulto a la poblacion".

Ahora la poblacion surcoreana condena a la banda conservadora como "bastarda politica abandonada por la nacion", "pirata japones oriundo de Corea" y "parasita de Abe".

Los habitantes surcoreanos no deben perdonar nunca a esos traidores enloquecidos por satisfacer su sucia ambicion del poder a precio de vender al enemigo jurado la dignidad e intereses nacionales.