Nacida en una familia campesina en el periodo de la dominacion del imperialismo japones sobre Corea, la abuela vivia maltratada y despreciada experimentando en carne propia la tristeza de la nacion apatrida.

Durante varias decadas, ella trabajo como agricultora con el deseo de responder a las benevolencias del Presidente Kim Il Sung y el Dirigente Kim Jong Il quienes construyeron y glorificaron el pais verdadero del pueblo.

La longeva no deja de trabajar aun despues de su jubilacion y vive felizmente el resto de su vida manteniendo buen estado de salud.