En la reciente ceremonia de entrega del nuevo buque Aegis de las "Fuerzas Maritimas de Autodefensa", el ministro de Defensa japones, Kishi, abogo por tomar la "disposicion perfecta" hablando de la "severidad e incertidumbre del ambiente de seguridad".

Tal retorica peligrosisima es igual a la orden de dar mas acicate a los preparativos para emprender en cualquier momento la agresion al continente.

Se pone mas frenetica en el poder de Suga la ambicion de Japon de convertirse, cueste lo que cueste, en una potencia militar.

Preconizando abiertamente la continuacion de la politica del poder de Abe que ha marchado a galopes para convertir su pais en un Estado belico, el nuevo gabinete invierte gastos militares de la maxima dimension de la historia en el desarrollo, produccion y compra de los armamentos de ataque.

Construyo durante 6 meses apenas los buques de diferentes tipos y da espuelas al desarrollo de cazas Stealth de proxima generacion y el misil de larga distancia que alcanza a la RPDC y China.

Solo en marzo, celebro la ceremonia de botadura del buque escolta con cuerpo disminuido y sistema operacional compacto y puso a flote el nuevo buque sonometro, llamado como "cazasubmarinos", capaz de perseguir y distinguir los submarinos a cientos de kilometros y el submarino de diesel de mayor tamano en el mundo que tiene el tiempo de operacion submarina mas largo y la combatividad mejorada.

Se concentra en fundar nuevas unidades como la especializada en la educacion para formar el destacamento de defensa cibernetica y la de transporte maritimo para la defensa de la isla apartada. Por otra parte, planea organizar la unidad de batalla electronica a fin de perturbar las comunicaciones y radares de la contraparte con ondas electromagneticas en el tiempo de emergencia y ampliarla rapidamente a varias regiones.

Insatisfecho con los ejercicios militares hechos so pretexto de la defensa y rescate de la isla apartada, realiza los entrenamientos con otros paises en los mares este y sur de China y el Oceano Pacifico y otras zonas maritimas fuera del archipielago japones reforzando de esta manera su presencia militar en ultramar.

Los hechos evidencian la extremada ambicion de Japon de realizar a toda costa su anejado sueno de la "esfera de coprosperidad de la gran Asia Oriental".

Los agravantes movimientos militares de Japon constituyen un serio acto provocador que vulnera la paz y estabilidad regionales.

No se quedara con brazos cruzados la sociedad internacional ante las tentativas de Japon de volver a imponer las desgracias y sufrimientos a la humanidad.

Los reaccionarios japoneses deben actuar con prudencia al darse cuenta de la creciente precaucion de los paises regionales sobre Japon.