Dicen que esta embarcacion cazara las ballenas en el Pacifico hasta la segunda decena de noviembre junto con el barco-fabrica que partira de un puerto del departamento de Hiroshima.

Tambien en abril pasado, los medios de prensa habian publicado la noticia sobre la movilizacion de barcos pesqueros japoneses en la pesca de cetaceos.

Siendo un acto descarado tipico del pais isleno, que para sus intereses, no vacila en exterminar el animal protegido, patrimonio comun de la humanidad, el despacho del ballenero vuelve a comprobar evidentemente su naturaleza de bandido.

Como es conocido por todos, la Comision Ballenera Internacional (CBI) prohibio en 1986 la caza con fines comerciales para proteger los cetaceos en el peligro de extincion.

Pero, Japon capturo 850 mamiferos marinos como promedio anual bajo el rotulo de "investigacion cientifica", abusando del permiso de la CBI a la caza de algunas cabezas para el estudio, en vez de cumplir la decision de la misma entidad.

En marzo de 2014, la Corte Internacional de Justicia califico la pesca de Japon para la "investigacion" de acto ilegal con fines comerciales y sentencio su paro inmediato. Pese al rechazo de la sociedad internacional, Japon vino ampliando la captura poniendose cada vez mas descarado.

Se ha retirado de la CBI con la intencion de pescar legalmente las ballenas liberandose hasta del superficial compromiso de "investigacion y estudio".

Tras reanudar oficialmente la captura indiscriminada de ballenas con fines comerciales, la justifica como "cultura tradicional" desafiando frontalmente a los esfuerzos de la sociedad internacional por proteger esos recursos de fauna.

En el mundo hay muchos paises y cada uno tiene la cultura y tradiciones propias. Pero, Japon es el unico que comete abiertamente ese crimen en detrimento de la humanidad calificandolo como su cultura.

Pues, tal acto criminal no seria nada para Japon que describe como "justa" hasta la "guerra de la gran Asia Oriental" que impuso a la humanidad tremendas desgracias y sufrimientos en el siglo pasado.

No le importa a Japon el agotamiento de los recursos de cetaceo ni la destruccion del ecosistema.

Merece ser condenado por la humanidad ese pais salvaje y peligroso que no vacila en nada para sus inmediatos intereses mezquinos.

Japon debe parar ahora mismo sus acciones, que destruyen la cuna de vida de la humanidad, al darse cuenta de que producira consecuencias catastroficas su captura de ballenas.