Ya se ha revelado de manera irrefutable el caso de esclavitud sexual de version moderna, cometido por los imperialistas japoneses en el siglo pasado.

Sin embargo, Japon lo niega hasta en el escenario internacional a fin de eludir su responsabilidad legal y moral.

Los imperialistas nipones raptaron a 200 mil mujeres coreanas de diferentes edades para convertirlas en esclavas sexuales.

Al cabo de llevarlas a los campos de guerra como consoladoras del "ejercito imperial", cometieron el tremendo crimen de lesa humanidad de matarlas en masas.

Muchas victimas de esclavitud revelaron los hechos de ese incidente siendo testigos de la historia y hasta los culpables involucrados en la "caza de personas" declararon la verdad de lo ocurrido arrepintiendose de su antecedente bochornoso.

Tales declaraciones comprueban que el gobierno y el circulo militar de Japon son organizadores y operadores del regimen de esclavitud sexual de version moderna que reviste evidentemente el caracter forzado.

Sin embargo, ese pais cinico justifica su historia de agresiones diciendo que no hay la necesidad de sentirse culpable de la historia pasada y no se debe permitir que el 80% de la poblacion japonesa, nacido despues de la guerra, asuma la fatalidad de seguir pidiendo la disculpa.

Para colmo, insulta a las victimas como "prostitutas" insistiendo en que la violacion sexual en el tiempo de guerra no es un crimen de guerra ni el antietico. Ademas, trata de tachar de los manuales escolares los registros al respecto e impedir hasta el uso de la expresion "esclava sexual".

Tanto en virtud de la ley internacional como en lo moral, tal conducta de Japon resulta un acto cinico nunca tolerable y una burla y desafio a la justicia y conciencia de la humanidad.

Consterna a todo el mundo el cinismo de Japon que trata de eludir su responsabilidad legal y moral negando y ocultando su archicrimen de haber violado el elemental derecho a la subsistencia del ser humano y la dignidad de la mujer.

Ese hecho expone su malsano intento de repetir su historia de agresion a otros paises y naciones.

Japon debe tener presente que el crimen de guerra debe ser castigado sin falta y, en particular, la violencia sexual contra la mujer es el que no tiene prescripcion.

Debe pedir sinceramente las disculpas por sus inauditos crimenes del siglo pasado y liquidarlos debidamente.

El pueblo coreano no se quedara con brazos cruzados ante el proceder malvado del gobierno japones que intenta reproducir su expediente de crimenes antieticos.