Hace poco, el ministro japones de Defensa anuncio el plan de ejercicios militares que se desarrollaran dentro de este ano en combinacion con la operacion de caza Stealth F-35B en el buque escolta Izumo de las "Fuerzas Maritimas de Autodefensa".

Esta maniobra militar forma parte de los preparativos para atacar en cualquier momento a los paises vecinos con el buque de escolta del nivel de portaaviones bajo el pretexto de "defensa".

Ahora, Japon insiste injustamente en que "la conversion del buque Izumo en portaaviones con fines defensivos no infringira la Constitucion" y que "no se consideran como portaaviones de tipo ofensivo los buques sin los cazas permanentes".

Es una artimana cinica para ocultar el caracter ilegal y agresivo del aumento armamentista.

Desde el punto de vista militar, el portaaviones es un componente indispensable para asestar el ataque preventivo a otros paises y tomar la supremacia naval.

La realidad muestra que la tentativa de Japon de contar con el portaaviones contraviene a la Constitucion vigente que no le permite el uso de armas y la posesion de las fuerzas armadas de combate.

Sin embargo, las autoridades japonesas siguen enfrascandose en la remodelacion de Izumo con la ambicion de realizar a toda costa la conversion de su pais en potencia militar y cumplir asi su sueno anejo de "esfera de coprosperidad de la gran Asia Oriental".

Desde hace mucho tiempo, el pais isleno presento su conversion en potencia militar como una meta politica y vino haciendo todo lo posible por el respecto, considerando que su derrota en la Segunda Guerra Mundial se debe a la debilidad de la capacidad militar".

Se concentro en la modernizacion de armamentos con el proposito de mejorar la capacidad de ataque movil y la operacional de las "Fuerzas de Autodefensa" e intenta ahora poseer hasta el portaaviones.

Su blanco principal es la RPDC y otros paises vecinos.

El pais isla pretende reagredir el Extremo Oriente para hacerse el "caudillo de Asia" y aprovecharlo como buena oportunidad de tomar la hegemonia mundial.

En los ultimos tiempos, dio a la publicidad su plan de emplazar hasta el 2023 nueva "unidad electronica" y la de misiles en los islotes principales del departamento de Okinawa sin ocultar su objetivo de mantener a raya a China.

Al mismo tiempo, se promueve ininterrumpidamente la enmienda constitucional que convertira a Japon en Estado belico.

En este sentido, la posesion del portaaviones no es una simple renovacion de los pertrechos militares, sino la transformacion como Estado agresivo que vulnerara la seguridad regional y mundial y la civilizacion de la humanidad.

Japon no podra evadir el castigo duro de la historia, si recurre obstinadamente a la conversion en potencia militar y a la expansion territorial pese al rechazo y advertencia de la sociedad internacional.