La zona periferica de la explanada del Arco de Triunfo, punto de partida de la manifestacion, estuvo repleta de los habitantes deseosos de celebrar con solemnidad la efemeride significativa.

Antes de inicio de la marcha, hizo uso de la palabra el secretario del Comite del Partido del Trabajo de Corea en la ciudad de Pyongyang, Ri Myong Chol.

El orador dijo que en ocasion del 73o aniversario de fundacion de la RPDC, nuestra patria gloriosa, los participantes marcharan hacia la Plaza Kim Il Sung, que brilla con la historia de victorias y glorias de nuestro Estado, demostrando la imagen brava de los trabajadores que avanzan con firmeza por la unica senda del socialismo del tipo Juche.

La manifestacion de hoy pondra a la vista de todo el mundo el temperamento indoblegable del pueblo coreano que lucha con coraje multiplicado por construir una potencia socialista prospera y civilizada demostrando el poderio de unidad monolitica y la de cuerpo y alma, que constituyen la fuerza mas poderosa de la RPDC, recalco.

Exhorto a todos a marchar a pasos firmes con la voluntad revolucionaria de traer con adelanto el futuro de la RPDC en prosperidad, unidos con el mismo proposito en torno al estimado companero Kim Jong Un,

A las 10 en punto, repercutio en la explanada la melodia solemne de la "Oda al General Kim Jong Un" y comenzo la marcha masiva encabezada por la columna de banderas nacionales.

Los bloques de los funcionarios de ministerios y organos centrales, obreros, agricultores e intelectuales desfilaron agitando las banderas nacionales, las rojas y los ramos de flores.

La columna de jovenes y estudiantes y la de miembros de la Organizacion de Ninos de Corea, que marchaban levantando los letreros "Espiritu revolucionario del Paektu" y "Espiritu del monte Paektu", dejaron prever el futuro prometedor de nuestra patria.

Numerosos capitalinos estimularon a los manifestantes en las avenidas.

Los ciudadanos asomados a la ventana les agitaron apasionadamente las banderas nacionales, ramos de flores y sus manos.

El clima llego al climax cuando las filas entraban en la Plaza Kim Il Sung portando pancartas y recibiendo la ovacion de los capitalinos.

Las aclamaciones de los manifestantes y ciudadanos repercutieron haciendo ecos en el cielo azul de septiembre.