La sede de la gala artística frente al Palacio de los Congresos Mansudae estaba repleta de los trabajadores, jóvenes y estudiantes.

Entre los espectadores se distinguían Choe Ryong Hae, miembro del Presidium del Buró Político del Comité Central del Partido del Trabajo de Corea, primer vicepresidente del Comité de Asuntos Estatales y presidente del Presidium de la Asamblea Popular Suprema, de la RPDC, y otros cuadros del Partido y el gobierno, los diputados a la APS, los innovadores laborales, los ameritados, los funcionarios de ministerios y órganos centrales, los oficiales y soldados del Ejército Popular, los maestros, empleados y matriculados de las escuelas revolucionarias, así como los pyongyangneses y los habitantes de las zonas damnificadas por inundaciones que permanecen ahora en Pyongyang.

Fueron invitados el grupo de felicitación de coreanos residentes en Japón y los compatriotas quienes están de visita en Corea con motivo del día nacional, los representantes diplomáticos e integrantes de las representaciones y los extranjeros en Corea.

Se interpretó con solemnidad el Himno Nacional de la RPDC.

La función se inició con la canción "Patria radiante", obra monumental creada en los primeros días de la construcción del Estado.

Se pusieron en su escena varias piezas como las canciones con el tema de patriotismo, que sonaban en los anales de la gigantesca lucha por construir y desarrollar el Estado.

Los ejecutantes describieron bien la gloria de la RPDC que bajo la original idea de construcción del Estado y la dirección de los grandes hombres sin iguales, se ha convertido en un país de milagros en prosperidad y en la Corea heroica reconocida por todo el mundo, y el aspecto feliz del pueblo coreano que lleva una vida digna y orgullosa siendo ciudadanos de la potencia independiente.

La canción "Nuestra bandera nacional" llevó a clímax la atmósfera de la gala nocturna.

Se dispararon las salvas artificiales coronando el fin de la función.