El 3 de enero, cuando todos los países del mundo estaban todavía en un clima festivo del Año Nuevo, las fuerzas navales títeres de la RC libraron a la vez un simulacro en las aguas del Mar Este, el Oeste y el Sur con la participación de los destructores, barcos de escolta y otros de combate y los aviones de caza.

Seguido, las unidades de infantería, artillería y de zapadores emprendieron los entrenamientos de guerra en que tomaron parte también las brigadas blindadas.

Mientras se desarrollaba el entrenamiento conjunto de fuego artillero de EE.UU. y la RC con el fin de neutralizar el colectivo de las fuerzas artilleras de largo alcance de la República Popular Democrática de Corea, el bombardero estratégico B-1B de las tropas norteamericanas sobrevoló el día 15 del mes pasado el firmamento de la Península Coreana para presenciar en el ejercicio aéreo conjunto EE.UU.-Japón-RC.

El mismo día, las fuerzas aéreas de EE.UU. y la RC perpetraron los ejercicios de tiro de combate en el espacio.

A continuación, se pusieron en marcha durante varios días el primer entrenamiento aéreo conjunto EE.UU.-RC de este año con el nombre de "Ssangmae" y el ejercicio conjunto de combate especial en busca del asalto inesperado contra la RPDC.

Hasta el fin del mes pasado, las fuerzas aéreas norteamericanas en la RC lanzaron los cazas para adiestrar el ataque preventivo contra la RPDC.

El hecho prenuncia que se activarán más que nunca las maniobras militares anti-RPDC de EE.UU. y la RC.

Lo que no se puede pasar por alto es que tales juegos belicosos se realizan aun en una circunstancia desordenada como consecuencia de la disputa por la usurpación del poder.

También en este momento en que se anulan una tras otra hasta las jornadas diplomáticas debido a la confusión política en la RC, funciona invariablemente el "grupo consultivo nuclear" EE.UU.-RC, cuyo fin reside en aplastar a la RPDC con las armas nucleares, y se intensifican más que anterior los ejercicios de guerra agresiva anti-RPDC.

Esta realidad facilita a cualquier hombre suponer cómo lo aceptará la RPDC.

Continúan aun las acciones irresponsables de EE.UU. y la RC destinadas a exacerbar la tensión regional.

Sus actos hostiles y aventureros les acarrearán sólo las consecuencias desagradables.